Una de las zonas más singulares de O Grove es su istmo. Gracias a él el municipio se conforma como península, sirviendo de única vía de acceso al destino. Se trata, además, de un entorno de indudable interés tanto paisajístico como ecológico, ya que se encuentra enmarcado dentro de los límites de dos importantes zonas protegidas: el Complejo Intermareal Umia-O Grove y el Complejo Ons-O Grove.

Su margen occidental está ocupado en su totalidad por el arenal más extenso de la provincia de Pontevedra: la playa de A Lanzada. Bañada por las aguas del océano Atlántico, numerosos surfistas acuden a lo largo del año para surcar sus olas. Desde aquí se divisan la isla de Ons, perteneciente al Parque Nacional de las Islas Atlánticas y mágicos atardeceres.

El istmo en sí está conformado como un enorme complejo dunar. Aquí anidan aves protegidas como el chorlitejo patinegro. Un paseo de madera atraviesa las dunas con especial cuidado de no dañar el entorno.

Finalmente, el margen oriental del istmo está bañado por las aguas de la ría de Arousa. En esta importante zona intermareal están instalados varios observatorios de aves desde los que divisar una gran variedad de aves migratorias.